La Piazzetta del Lusso del aeropuerto de Milán duplica su espacio

La casa de moda Dolce & Gabbana y el fabricante de sombreros de alta gama Borsalino son las últimas marcas de lujo que abren sus puertas en el aeropuerto Linate de Milán, a solo 7 kilómetros al este del centro de la capital de la moda de Italia.

Los recién llegados se suman a una lista de algunos de los nombres más conocidos de la moda italiana, muchos de los cuales hacen su debut boutique en la nueva Piazzetta del Lusso de la entrada, una amplia plaza de doble altura en el centro del área de salidas de la terminal. Entre ellos se encuentran Emporio Armani, Ermenegildo Zegna y Salvatore Ferragamo, además de la casa de moda masculina Boggi Milano, y los fabricantes de bolsos Piquadro y The Bridge.

La llegada de Borsalino marca la entrada de la marca en el canal de viajes minoristas y le da una tercera ubicación en Milán, que se suma a la sala de exposición de la compañía en la histórica Via Sant’Andrea, y la mundialmente famosa galería comercial de la Galleria Vittorio Emanuele II.

El director gerente de Borsalino, Mauro Baglietto, comentó: “Los viajes y la idea de ‘el viaje ‘ son intrínsecos al ADN histórico de nuestra marca. Esta boutique de Linate completa un año muy especial en línea con nuestros objetivos de crecimiento sostenible ”. Sigue a la inauguración de tiendas en algunos de los destinos de la jet-set del mundo, incluido el prestigioso Nammos Village, en Mykonos, Grecia; Playa de Loulou en Saint Tropez, Francia; y el Hotel Metropole en Monte Carlo.

No muy lejos, la tienda de Dolce & Gabbana se encuentra en una esquina entre Ermenegildo Zegna y Emporio Armani. Aún en el mismo espacio de lujo, están el zapatero artesanal Fratelli Rossetti y otra marca aún sin nombre, posiblemente una tienda de relojes de múltiples etiquetas.

Como aeropuerto de la ciudad, aproximadamente dos tercios del tráfico, en épocas no pandémicas, son negocios. Esto se presta a la venta al por menor de lujo, pero debido a que, en el pasado, SEA Milan Airports había tendido a centrar su atención en su puerta de entrada internacional de Malpensa, Linate permaneció subdesarrollado durante mucho tiempo. “La demanda y el interés estaban ahí, pero la infraestructura no estaba, hasta ahora”, dijo Battuello.

Como parte de la renovación, SEA Milan también ha agregado un entrepiso con tres restaurantes de servicio de mesa administrados por Autogrill, convirtiendo este nivel en un destino gastronómico. Ya se está observando un fuerte aumento en el gasto en alimentos y bebidas, un patrón que ha sido evidente en muchos aeropuertos durante la pandemia y que ha atraído a nuevos minoristas al segmento .

La nueva galería comercial se caracteriza por un concepto curvilíneo con 23 tiendas en total, casi el doble del número anterior. También se han colocado obras históricas de renombrados diseñadores italianos a lo largo del viaje de los pasajeros gracias a una asociación con el Triennale Design Museum de Milán . Desde el punto de vista arquitectónico, se aplicó la neurociencia al espacio para fomentar una sensación de bienestar después de lo que a menudo es un proceso de control de seguridad ansioso. Reducir el estrés también es una forma de alentar a los viajeros a relajarse y gastar dinero cuando llegan a las tiendas.

A medida que aumente el número de pasajeros en el aeropuerto de Linate, SEA Milán buscará la puerta de entrada a la ciudad para reponer parte de los ingresos perdidos durante la pandemia. De 760 millones de euros en 2019, se redujo a 286 millones de euros, lo que hizo que la empresa se convirtiera en pérdidas. El comercio minorista será un segmento fundamental en la reconstrucción tanto de las ventas como de la rentabilidad.