LVMH refuerza su presencia en China con la apertura simultánea de cuatro macro-flagships en Pekín

LVMH prepara uno de sus movimientos más ambiciosos de los últimos años en el mercado asiático: la apertura casi simultánea de cuatro tiendas emblemáticas de Louis Vuitton, Dior, Tiffany & Co. y Loro Piana en la capital china. Cada una de ellas ocupará varios niveles y se ubicará en enclaves de máximo prestigio —como Taikoo Li y Wangfujing— con el objetivo de redefinir la experiencia física del lujo en el mayor mercado de consumidores de alta gama del mundo.

Las nuevas flagships llegan después de un periodo de desaceleración del consumo de lujo en China, donde la incertidumbre económica y los cambios en el comportamiento del cliente habían afectado al retail físico en 2023 y 2024. Este despliegue de LVMH envía un mensaje claro: el grupo confía plenamente en la recuperación del mercado chino y apuesta por una estrategia de reactivación basada en espacios icónicos, servicios inmersivos y clienteling de alto nivel.

Cuatro aperturas, un mismo mensaje: liderazgo absoluto

Louis Vuitton, emblema del grupo, inaugura un espacio de varios pisos diseñado para integrar moda, marroquinería, joyería, gastronomía y arte contemporáneo, consolidando el modelo híbrido que la maison está construyendo en ciudades clave como París y Seúl.

Dior apostará por una boutique experiencial centrada en alta costura, belleza y accesorios, con áreas de personalización, tecnología inmersiva y una terraza para eventos privados.

Tiffany & Co. refuerza su nueva etapa bajo LVMH con una flagship que replica el concepto global “The Landmark”, con piezas históricas, joyería de alta gama y una galería dedicada al diamante excepcional.

Loro Piana abrirá su mayor espacio en Asia, con tres niveles dedicados a moda, casa y lifestyle, reafirmando el posicionamiento ultraluxury de la marca.

China vuelve al centro del lujo global

Aunque el consumo doméstico chino pasó por una etapa de ralentización, los indicadores actuales muestran un retorno progresivo a la compra experiencial, especialmente en las grandes capitales. LVMH, que en los últimos años ha reforzado su retail en Shanghái y Shenzhen, lanza ahora un mensaje de confianza que podría redefinir la estrategia del resto de conglomerados internacionales.

Esta consolidación en Pekín también forma parte de una lectura más amplia: la experiencia física del lujo vuelve a ser clave. El cliente chino exige espacios memorables, atención personalizada y conceptos arquitectónicos sofisticados. LVMH responde elevando el estándar de lo que una flagship puede ofrecer.

Una operación que marca el ritmo del sector

Con estas aperturas, LVMH no solo acelera su expansión, sino que prepara el terreno para una nueva fase del lujo en Asia: más experiencial, más inmersiva y más ligada a la construcción de marca a largo plazo.

El sector observa con atención. Una vez más, el gigante francés toma la delantera.